El Centro Provincial de Artes Plásticas y Diseño, conocido como Luz y Oficios, presenta a partir de este 16 de noviembre la exposición personal Olympus de Agustín Bejarano. Tomando como punto de partida pasajes de antiguas leyendas de deidades griegas, el artista desarrolla, a través de estas piezas, una narrativa personal cuajada de claras referencias a los contextos y las circunstancias actuales.
Con esta exposición, Agustín Bejarano (Camagüey, 1964) da continuidad a la presentación antológica que realizara en esa misma institución bajo el título de La Cámara del Eco (marzo-abril 2018). En aquella oportunidad el artista reunió un conjunto de pinturas y dibujos en homenaje al desaparecido crítico, ensayista y escritor Rufo Caballero Mora (Cárdenas, 1965-La Habana, 2011).
La serie Olympus , mostrada en parte en aquella ocasión, se despliega ahora en piezas de gran formato. Pinturas que dan fe del extraordinario oficio de su autor, concentrado una vez más en formularios un universo propio a partir de conexiones y paralelismos entre pasado y presente, arte y sociedad, realidad y ficción. La Isla y la figura femenina resultan el centro de sus epigramas, formulados desde lo perentorio de una admonición redentora. Una contienda permanente, visceral, imprescindible, planteada en aparente retrospectiva.
“La serie Olympus está condicionada por esa voluntad de peregrinaje y extrapolación simbólica que ha caracterizado casi toda la obra de Agustín Bejarano. Ella responde, en esencias, a las mismas consideraciones técnicas, metodológicas, con que fueron concebidos los imaginarios fantásticos de otras etapas; las iconografías de aliento renacentista, neoclásico, mezcladas innovadoramente a partir del subterfugio kitsch, ya través de las cuales intentan distanciarse de la realidad o aproximarse a ella ”, afirma David Mateo en las palabras del catálogo de la muestra.
Especial para Artcrónica
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