Como parte de las muestras colaterales de la XII Bienal de La Habana quedó inaugurada en la tarde del 11 de abril la exposición Tres diferente de Tres en Galería Habana (Línea 460, entre E y F, Vedado), que permanecerá durante todo el mes en curso. La misma exhibe obras de Esterio Segura, Roberto Diago e Iván Capote y resulta sorpresiva la ausencia de un amplio público, como debería esperarse. La pesada carga simbólica del número tres dentro de las artes se traduce aquí como sinónimo de tridimensionalidad, de lo escultórico, lo instalativo.
La muestra implica tres figuras harto conocidas dentro del panorama de las artes visuales en el país pero cuyas inquietudes estéticas y formales los conducen por lenguajes en extremo diversos; convergentes en cuanto a la experimentación espacial se refiere. Las tres poéticas se traducen en una exhibición cuyo hilo conductor es la relación entre el objeto y el espacio; por momentos agresiva, por momentos pasiva. El espectador se ve forzado a pasar de una actitud contemplativa en un inicio, a superar la incomodidad y el extrañamiento.
Las obras de Esterio Segura discursan sobre la jerarquía y los disímiles escollos en la obtención del conocimiento. Para ello se apoya en la figura del libro, tanto a nivel conceptual como formal, invitando a cuestionamientos en cada sujeto sobre la distribución misma de los saberes. Diago por su parte permanece fiel a su estética del reciclaje realizando esta suerte de muro infranqueable que rodea a la columna y provoca un fuerte impacto visual. Por último encontramos las dos piezas de Capote: la primera de ellas interactúa con el público que se siente inevitablemente atraído por su vaivén, la segunda más perturbadora pues vuelve el artista a recurrir al peso abrumador de la palabra y el simbolismo que entraña.
Amanda Beatriz Ramos Márquez