BIOGRAFÍA
CELIA – YUNIOR
Celia Irina González Álvarez, La Habana, 1985
Yunior Aguiar Perdomo, La Habana, 1984
ESTUDIOS:
Máster en Antropología Visual, Flacso, Ecuador 2009 Graduados del Instituto Superior de Arte 2004 Graduados de la Academia Nacional de Bellas Artes “San Alejandro”
EXHIBICIONES PERSONALES:
2015 Seis ojos y tres lenguas (bipersonal). Arte Actual, Quito 2014 Sala Discontinua (bipersonal). Centro de Desarrollo de las Artes Visuales, La Habana 2013 Homemade Translation. Amatorska, Londres 2012 Creo Saber… Centro de Desarrollo de las Artes Visuales, La Habana
EXPOSICIONES:
2018 Climate Change: Cuba/USA. Museo de Arte Contemporáneo, Universidad del Sur de La Florida, Tampa 2017 Delikado Peligroso. Matadero, Madrid / Cuba mi amor. Les Moulins, Galería Continua, París / No White/No Black (No and). Fundación Cifo Art Space, Miami / Art x Cuba. Contemporary Perspectives since 1989. The Ludwig Forum for International Art, Aachen, Alemania / Colección de Archivos. Museo Nacional de Bellas Artes, La Habana / ON/OFF. Video Show, Casa Víctor Hugo, La Habana / Nido sin árbol. Galería Continua en la UNAIC 2016 Madre de todas las artes. Centro Wifredo Lam 2015 Cabeza de Ratón. Estudio Figueroa-Vives, La Habana / The Spaces Between. Contemporary art from Havana. Universidad UMEA, Suecia / Entre la individualidad y el contexto. Pabellón cubano, Bienal de Venecia / Ram, Rom, Rum. Colateral Bienal de La Habana / Seis ojos y tres leguas. Arte Actual, Quito / Rendez-Vous. Bienal de Lyon, Francia 2014 Pan y Circo. Ruinas del Instituto Superior de Arte, La Habana / Mordida. Factoría Habana, La Habana / Sala Discontinua. Centro de Desarrollo de las Artes Visuales, La Habana / The Spaces Between. Contemporary art from Havana. Morris and Helen Belkin Art Gallery, University of British Columbia, Vancouver / Sting. ESMOA, El Segundo, Los Ángeles, California 2013 Para quebrar el muro. Museo Nacional de Bellas Artes, La Habana / Curadores Come Home. Espacio Aglutinador, La Habana / Homemade Translation. Amatorska, Londres / Administration in time of melted plastic. n.o.w here, Londres / El ardid de los inocentes. Factoría Habana, La Habana 2012 Festival de videoarte. Biblioteca Nacional, Buenos Aires / Unterm Schweibfell. Galería E105, Berlín / Festival Loop. Barcelona, / 11 Bienal de La Habana. Gran Teatro de La Habana / Un olor que entra por mi ventana. Museo del Ron, La Habana
RESIDENCIAS:
2017 Residencia El Ranchito, Matadero, Madrid en colaboración con Residencia Artista x Artista, La Habana 2016 Residencia de la Bienal New Talents, Colonia, Alemania / Residencia de la Bienal de Marrakech, Marrueco 2014 Programa de Residencia del Ministerio Federal de Educación de Austria, el Arte y la Cultura en cooperación con KulturKontakt, Austria / Comida y sustentabilidad, Skills Biennale, Gray ´s School of Art / Robert Gordon University, Aberdeen City, Scotland / Artistas en residencia en ESMOA and artlab 21, El Segundo, California 2013 Artistas en Residencia con Deveron Art / The Town is the Venue, Huntly, Aberdeenshire
PREMIOS Y BECAS:
2017-2018 Beca de artes plásticas de la Fundación Botín, Santander, España 2017 Grants & Commissions Program, The Cisnero Fontanals Art Foundation, CIFO, Miami 2015 Mejor artista joven del año, Premio de la Fundación Farber 2012 Beca de Creación del Centro de Desarrollo de las Artes Visuales, La Habana 2010-2011 Beca para artistas emergentes de Havana Cultura, Havana Club Internacional, La Habana
COMENTARIO
Todo empezó cuando unos muchachos sedientos e hiperquinéticos que estudiaban grabado en la Escuela de Artes Plásticas de San Alejandro en La Habana, intuyeron que algo los había separado en la convivencia privada y hermanado en la dinámica del arte contemporáneo. Desde entonces, una amistad sostenida con respeto, admiración y cariño pos-amatorio, se encargaría de consolidar un binomio artístico, que se mantiene activo hasta los días que corren.
Siguiendo esta ruta, el arte como motivo de discusión reemplazó al goce efímero de la intimidad. Un renovado deslumbramiento colmó a quienes empezaron a dialogar a un nivel más cerebral, para ficcionar juntos. Durante este proceso de gestación iniciado en 2004, Celia González (n.1985) y Yunior Aguiar (n.1984) articularon una metodología de producción visual, apta para evitar los clichés del sociologismo vulgar o esa politiquería mass-mediática de rumores escandalosos.
Las yuxtaposiciones forzadas o “armonía de contrarios” extraídas de la realidad, útiles para hilvanar una cadena de eslabones disparatados, desatan secuelas que activan el imaginario crítico de Celia-Yunior. Ello para buscar una confluencia entre flujo temporal y espacio detenido, la cifra y sus metáforas, el número y los símbolos que prevalecen en el diálogo cercano o remoto entre los ciudadanos y las instituciones rectoras de la vida política, social, económica y cultural del país. (…)
Celia-Yunior parecen haber nacido para extraviarse y reencontrarse en el laberinto de los contrastes. Uno de estos retos es el derroche de esa fantasía popular en tareas de sobrevida, y ese discurso hegemónico ebrio de parquedad justificatoria, una mano dura que no cree en lágrimas cuando dicta medidas impopulares. Por dicha senda, masa y poder sostienen un careo silente a modo de work in progress. (…)
Ni cautelosos ni panfletarios, el dúo habanero rechaza la noción del artista como ideólogo. En el limbo de los equilibristas, la operación consiste en una quimera sociológica, un ajuste de cuentas simbólico que procura compensar la escasez de información, regularmente escamoteada por los medios de difusión masiva.
Gracias a esta búsqueda, concientizamos que el promedio de edad de la dirigencia política y sus lustros rigiendo la nomenclatura es casi proporcional al onomástico de habitantes sin otra salida que vegetar o morir en su lugar de origen. También nos percatamos de cuan equívoco es un contrapunto orgánico entre desarrollo como apariencia propagandística y subdesarrollo mental como esencia.
El repertorio ideo-temático de Celia-Yunior nos aparta del simulacro artístico que se repite con sus trucos para llegar al mercado y nos devuelve a la crudeza de la vida tal cual. Sería reconfortante verlos transformados en celebridades de pasarelas avant-gard especulando sobre listados de marca, negociaciones o eventos junto a estrellas sumergidas en un mar de copas traslúcidas. ¿Acaso este no es el objetivo tapado o evidente de los productores visuales contemporáneos?
Cuánto añorarían los sufridores ejemplares cubanos porque esta manera de ilustrar el naufragio evolucionista perdiera vigencia. Ello derivaría en argumento para que el sombrío Franz Kafka no resucitara en cada rincón de la Isla, ese huésped de honor en el eterno retorno del absurdo como emblema de una nación.
Fragmentos de Kafka resucita en La Habana de Héctor Antón