José Villa Soberón. Hijo del espacio

José Villa Soberón. Hijo del espacio

Es un monográfico dedicado al escultor José Villa. Tiene como antecedentes las investigaciones de los doctores María de los Ángeles Pereira y Facundo Tomás contempladas en los materiales José Villa. Esculturas (Artecubano Ediciones, 2005) y Esculturas de José Villa (Instituto Valenciano de Arte Moderno, 2010), respectivamente. En tanto, el presente es un volumen completo y actualizado de la obra del artista.

Reúne fragmentos de escritos, tomados de otras publicaciones, de voces autorizadas: María de los Ángeles Pereira, Abel Prieto, Rufo Caballero, Facundo Tomás, Miguel Barnet, Fernando Castro Flórez y Marilyn Sampera. El peso mayor de los textos recae en la doctora Llilian Llanes, quien señala aspectos imprescindibles para una aproximación adecuada a la obra de José Villa. La especialista, en la medida que articula su discurso, va recorriendo puntuales análisis que otros autores han realizado sobre los trabajos del escultor. Este, resulta así, un mosaico de opiniones que ofrecen una lectura amplia, con diversidad de enfoques hacia la producción del artista.

Llilian Llanes se detiene fundamentalmente en los eventos más relevantes que han podido condicionar el trabajo José Villa. Mediante un recorrido biográfico, escrito con muchísima sensibilidad. Con un lenguaje sencillo, elocuente y, sobre todo, muy atinado, la doctora señala la evolución de la obra de Villa y sus aportes en el ámbito nacional y universal. Lo reconoce como el escultor cubano que, con mayor acierto, se ha apoderado del espacio público. Nos precisa: “Las representaciones de Villa Soberón, no importa el lenguaje utilizado, han sabido captar la memoria, largo tiempo vivida, de la sociedad cubana y rescatar raíces que, en algunos casos, se han mantenido alojadas en lo más profundo”.^[1]

Un aspecto que pone de relieve Llilian, son los ires y venires del artista por la escultura figurativa y abstracta. Donde otros especialistas han visto disonancias, la doctora reconoce conciliación, coherencia, legitimidad y, en especial, la voluntad invariable del artista de relacionarse con el público y a través de su obra. Es, en esta voluntad de conectar con los interactuantes de sus piezas, donde se enlazan probablemente –y de acuerdo con el criterio de Llilian Llanes– el lenguaje abstracto y el figurativo de la obra del artista.

En general, el libro hace gala de la excelencia del trabajo de José Villa Soberón, que se reproduce en una galería visual: esa comprende la catalogación completa y exacta de cada obra. Por los textos, la cronología del artista, el listado de fuentes bibliográficas, es este un documento impreso de referencia para historiadores e investigadores del arte. Y de todo sujeto interesado en la obra del escultor Villa.

1. Llilian Llanes: “Para Villa con admiración y cariño”, texto en el volumen José Villa Soberón. Hijo del espacio (2019). ↑